Colegio Monarch continúa su compromiso de proporcionar una educación inclusiva y personalizada para estudiantes neurodivergentes en Guatemala, demostrando que lo que para algunos parecen desafíos, pueden convertirse en las fortalezas que impulsan a cada alumno hacia el éxito. Con una metodología centrada en el desarrollo de habilidades únicas, Monarch ayuda a sus estudiantes a descubrir y explotar su verdadero potencial.

Juan Andrés Lara, de 17 años, es uno de los tantos estudiantes que han experimentado el impacto positivo de esta metodología. Diagnosticado con Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), dislexia y disgrafía a los 7 años, Juan Andrés enfrentaba grandes retos y dificultades en su aprendizaje con sistemas educativos tradicionales. Sin embargo, gracias al enfoque de Monarch, ha logrado ver sus “dificultades” como fortalezas. “Monarch me enseñó que lo que muchos llaman ‘dificultades’ en realidad son fortalezas escondidas. En lugar de ver mi hiperactividad y déficit de atención como obstáculos, Monarch me mostró que son herramientas únicas que me permiten sobresalir,” afirma Juan Andrés​.

Hoy en día, Juan Andrés mantiene un alto rendimiento académico, lidera un grupo de asistencia social y ha tenido experiencias destacadas en programas internacionales como Stanford. “Gracias a Colegio Monarch, les puedo decir que nuestras “dificultades” pueden ser nuestras mejores ventajas. El Colegio Monarch fue el que me enseñó cómo hacerlo, cómo convertir eso que me causaba problemas en algo que es la mejor herramienta que tengo. Hoy sé que pensar de otra manera es lo que me hace sobresalir” añade Juan Andrés, orgulloso de sus logros y del camino recorrido​.

María José Leal, madre de Juan Andrés, comparte su caminar y agradecimiento por el apoyo que su hijo ha recibido. “Fue un camino muy demandante y con muchos retos tanto para Juan Andrés como para nuestra familia en general. Con el transcurso de los meses observamos cómo empezó a brillar por él mismo percatándose que su forma de pensar fuera de lo común no era una dificultad, sino que una fortaleza. En Monarch encontró la libertad de ser genuinamente él y de explotar sus fortalezas,” explica María José. La experiencia de su familia en Monarch ha sido de esperanza y empoderamiento, y afirma que el enfoque del colegio cambió su perspectiva sobre el aprendizaje y el desarrollo de toda su familia.

Colegio Monarch reafirma su compromiso de crear un entorno educativo terapéutico que promueva el desarrollo integral de cada estudiante, donde puedan identificar tanto sus fortalezas como áreas de oportunidad. "Nuestro propósito es transformar vidas a través de una educación personalizada, inclusiva y centrada en las necesidades e intereses individuales de cada estudiante", afirma Olga Renata Rivera de Alejos, representante de Colegio Monarch; el cual, sigue empoderando a sus estudiantes y a sus familias, demostrando que una educación personalizada, inclusiva y adaptada es fundamental para el crecimiento y éxito de cada individuo.