"No es falta de amor, es desequilibrio
de necesidades": así resume el psicólogo guatemalteco Juan Ignacio Ardón
el problema central de muchas crisis de pareja en su nuevo libro "Refugio
y Diversión: las necesidades psicológicas en el amor", una herramienta
que cambiará la forma en la que entendemos las relaciones.
Tras
observar cientos de parejas durante más de 20 años, Ardón descubrió que dos
necesidades psicológicas son las verdaderas culpables de los conflictos que
terminan en separación: el refugio y la diversión. "Cuando una pareja
experimenta conflictos recurrentes, casi siempre se debe a un déficit en una de
estas áreas", explica el autor.
Las
señales de alarma que nadie te había explicado
"Si
sientes miedo o ansiedad constante en tu relación, probablemente te falta
refugio. Si el aburrimiento domina, lo que falta es diversión", señala
Ardón. "Lo sorprendente es que muchas parejas intentan resolver estos
problemas de la manera equivocada".
El
refugio simboliza la seguridad de tener a tu pareja a tu lado en los momentos
difíciles. Cuando esta necesidad se satisface, se genera tranquilidad y
bienestar; en cambio, su ausencia provoca miedo y ansiedad. Sin embargo, un
exceso de refugio puede disminuir el deseo, lo que explica por qué parejas muy
estables pueden enfrentar problemas de intimidad.
Por
otro lado, la diversión es la chispa que mantiene
viva la relación. Cuando está presente, genera placer y entusiasmo. Si falta,
aparece el aburrimiento. Pero un exceso de diversión puede generar intranquilidad y ansiedad, creando una sensación de
inestabilidad.
Las
relaciones amorosas como pacto de bienestar mutuo
Ardón desmonta un mito común: "El
problema no es tu pareja, sino cómo decides manejar esa necesidad
insatisfecha". Desde esta perspectiva, redefine las relaciones amorosas
como acuerdos conscientes en los que “el bienestar de la relación depende de
que ambas necesidades psicológicas se satisfagan de manera equilibrada”.
Lo más revelador es su replanteamiento sobre la responsabilidad en pareja: "Nuestra pareja no tiene la obligación de satisfacer nuestras necesidades, pero al decidir compartir la vida, asumimos el compromiso de nutrir la relación para que ambos nos sintamos seguros, respaldados y felices".
La trampa
de los "evasores complementarios"
El libro identifica un patrón dañino, los
"evasores complementarios", soluciones aparentes que deterioran las
relaciones a largo plazo.
"Cuando surgen problemas en el
matrimonio, la tentación de buscar alivio fuera de la relación —ya sea en una
infidelidad, en el trabajo, en amigos o en distracciones constantes— puede ser
fuerte. Esto es lo que llamo una resolución viciosa", advierte Ardón.
"Es como tomar un analgésico para un dolor de muela: alivia
momentáneamente, pero la infección sigue avanzando".
El resultado es lo que denomina una
"relación agridulce": gratificante en algunas áreas, pero
profundamente insatisfactoria en otras, donde los problemas subyacentes
permanecen intactos.
"Refugio y Diversión:
las necesidades psicológicas en el amor" no solo
explica por qué las relaciones se deterioran, sino que ofrece herramientas
prácticas para fortalecerlas. Con ejercicios diseñados para identificar y
equilibrar estas necesidades esenciales, este libro es una guía para quienes
buscan relaciones más plenas y satisfactorias. Disponible en librería Sophos
por Q275; una lectura clave para transformar la manera en que vivimos el
amor en pareja.
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